Podemos concluir

Nos podemos dar cuenta de que la PNL está formada por un conjunto de herramientas y estrategias, relacionadas entre sí, que han sido investigadas con anterioridad y plantea que así como hemos aprendido estas estrategias, muchas de las cuales no son adecuadas, también podemos desaprenderlas y aprender nuevas, con el objetivo de conservar sólo aquéllas que nos ayuden a enfrentarnos al mundo de manera más eficiente.

Debemos descubrir cual es nuestra estrategia empleada y ver lo inadecuado de ella para mostrar una nueva estrategia, más adecuada a determinados objetivos. “La verdadera dificultad para cambiar no radica en desarrollar nuevas ideas, sino en escapar de las viejas” John Maynard Keynes. Por ello como  Sócrates Campos Lemus nos dice: “Tenemos que ver la legitimidad de los otros pensamientos porque en la vida no hay verdades absolutas y es por esa razón que debemos mantenernos flexibles y relajados porque a través de las nuevas ideas podemos aprender y crecer recordando que “no hay conocimiento que no sea poder”. (Emerson).” (2009).

Fue notorio que nadie en el mundo de la PNL afirma ni pretende decir que la PNL sea una ciencia. Esta es también la postura de Bandler y Grinder, que basan todo su trabajo en la existencia previa de ciertos modelos, anteriormente mencionados, que funcionan y dan resultados. De hecho, la misma PNL gira en torno a la idea de “Si funciona, úsalo” o “Si te da resultados, adelante”. (Guerra). Cada uno tiene su propia verdad. Así se entiende y así se comprende y se acepta.

Tenemos claro que la ciencia funciona bien con cosas pero en cuanto entramos en áreas humanas, se hace evidente que cada persona es un mundo. Cada ser humano es un sistema extremadamente complejo con una historia personal única e incomparable y cuando uno trabaja con seres humanos, las reacciones son imprevisibles, de ahí que sea fundamental la flexibilidad y la creatividad para obtener los resultados deseados por cada uno. Una aproximación científica que conecte causas y efectos de manera sólida es sencillamente imposible por la complejidad de la misma naturaleza humana.

“La PNL, ni es una ciencia ni pretende serlo, y a mi entender puede prescindir perfectamente de cualquier certificación científica manteniendo perfectamente su utilidad, su validez y su funcionalidad.” (Malonda, 2010)